El arrendamiento para roomies (o compañeros de cuarto) es una modalidad del arrendamiento habitacional en la que dos o más personas comparten una vivienda alquilada, ya sea dividiendo el espacio o teniendo habitaciones individuales con áreas comunes (cocina, baño, sala). Aunque no es un tipo legalmente diferenciado de contrato, sí tiene características específicas y prácticas comunes que vale la pena conocer.